El senador Carles Mulet preguntó si eran necesarios hacerlos tan bajos, por sus afecciones sobre la fauna en zonas protegidas de la cuenca del Mijares y la legalidad de los mismos. Compromís no descarta trasladar las quejas a la Organización de Aviación Civil Internacional
El Gobierno ha contestado a Compromís en el Senado que se seguirán ciñendo a la normativa militar y no a las normativas proteccionistas de las CCAA en los vuelos militares que se enmarcan dentro de las rutinarias y programadas, incluidas en el plan de adiestramiento básico de tripulaciones del Ejército del Aire.
El senador de Compromís, Carles Mulet, recogió las quejas vecinales tras unas maniobras que tuvieron lugar el viernes 15 de abril de 2016. Los vecinos de la Cuenca del Mijares (Castelló) se sobresaltaron por los vuelos frecuentes y a muy baja altura de aviones militares del ejército. Arañuel, Cortes de Arenoso y, en general toda la comarca y cuenca del Mijares son algunos de los puntos que se ven afectados por estos vuelos rasantes, a menos de 100 metros de altura sobre zonas habitadas. Al parecer los aviones, dentro de sus maniobras, realizan acrobacias y caídas en picado de forma reiterada y constante en zonas de nidificación de especies como el águila perdicera. Además el Alto Mijares está incluido dentro de la red Natura 2000 al ser un Lugar de Interés Comunitario (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), muy utilizada por las aves migratorias.
“En la interpelación preguntábamos si tenían previsto sustituir el recorrido de estos vuelos o maniobras y si éstas podían realizarlas en el ámbito de estas figuras de protección de fauna y tan cerca de núcleos habitados y de lugares en los que habita fauna de interés y protegida. En la respuesta se ignora cualquier aspecto medioambiental, de afección a estas especies protegidas y se remite a unas supuestas mediciones realizadas por ellos mismos en las que indican que en ningún punto o centro de población próximo se sobrepasaba el valor de 55 dBA”, lamenta Mulet.
El senador ha señalado que no estamos en contra, por estar, de las maniobras del ejército del aire, pero seguro que éstas son compatibles con la tranquilidad de la gente y de las especies, por lo que vamos a solicitar esos informes que esgrimen y a proponer un plan de adiestramiento en época de paz que no les afecte, alejándolos del ruido”.
Para Compromís “parece existir una clara colisión de derechos y competencias y suelen ser las zonas periféricas y rurales las que son siempre utilizadas como conejillos de indias, como zonas de formación y ruido, como si sus valores fueran menores que los que puedan existir en la calle Bailén de Madrid por citar un ejemplo, por lo que abogamos por la compatibilidad y el respeto”.
Así el senador de Compromís ha indicado que, si entre los objetivos de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) figuran el de reducir al mínimo los efectos ambientales negativos de las actividades de aviación civil, “no descartamos, si los informes solicitados así lo apuntan, acudir al Consejo de la OACI en Montreal y trasladarles las quejas y nuestras propuestas”.