El senador de Compromís, Carles Mulet viene presentando una extensa batería de iniciativas respecto a la situación del mausoleo franquista del Valle de los Caídos. Algunas de estas son preguntas escritas, además de mociones y peticiones de documentación, algunas de las cuales se substanciaron después de una reciente visita al lugar.
Dos de estas preguntas han sido respondidas hoy por el Gobierno Central, La pregunta “ El relator especial para la promoción de la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición de la ONU, Pablo de Greiff, ha urgido a España a incrementar los recursos que se destinan a las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo, a dejar sin efecto la Ley de Amnistía de 1977 para que los crímenes puedan ser investigados y a “reconsiderar” el Valle de los Caídos porque no se trata de un asunto de “política partidista”.
Por todo ello se pregunta: -¿Piensa el Gobierno soltar lastre con sus antepasados ideológicos y desfranquizar el Valle de los Cuidos?
La respuesta que da el Gobierno es : En relación con la información solicitada por Su Señoría cabe informar que en materia de símbolos franquistas, se ha cumplido el mandato legal de su retirada en el ámbito de la Administración General del Estado (artículo 15 de la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura), único sobre el que tiene competencia el Gobierno. En el ámbito comunitario y municipal se han hecho las recomendaciones oportunas, si bien es cierto que no siempre han sido atendidas.
Por otra parte, cabe señalar que el presente régimen jurídico del Valle de los Caídos viene configurado por diversas normas pre y post constitucionales hasta la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, citada anteriormente. Este último texto cierra esa normativa dedicando al Valle de los Caídos dos preceptos: el artículo 16 y la disposición adicional sexta, donde se reproducen las conclusiones contempladas en el Informe General de la Comisión para el estudio de la situación de las víctimas de la guerra civil y del franquismo, creada por Real Decreto 1891/2004, de 10 de septiembre, y elevado al Gobierno el 28 de julio de 2006. En concreto estos preceptos disponen lo siguiente:
– “Artículo 16. Valle de los Caídos.
- El Valle de los Caídos se regirá estrictamente por las normas aplicables con carácter general a los lugares de culto y a los cementerios públicos.
- En ningún lugar del recinto podrán llevarse a cabo actos de naturaleza política ni exaltadores de la Guerra Civil, de sus protagonistas, o del franquismo.”
– “Disposición adicional sexta.
La fundación gestora del Valle de los Caídos incluirá entre sus objetivos honrar y rehabilitar la memoria de todas las personas fallecidas a consecuencia de la Guerra Civil de 1936-1939 y de la represión política que la siguió con objeto de profundizar en el conocimiento de este período histórico y de los valores constitucionales. Asimismo, fomentará las aspiraciones de reconciliación y convivencia que hay en nuestra sociedad. Todo ello con plena sujeción a lo dispuesto en el artículo 16.”
Desde una perspectiva normativa, resulta claro que el Valle de los Caídos no tiene en la actualidad el significado que sugiere Su Señoría.
Para Mulet, esta respuesta es insultante “Que digan que como la fundación gestora del Valle de los Caídos tiene entre sus objetivos objetivos honrar y rehabilitar la memoria de todas las personas fallecidas a consecuencia de la Guerra Civil , y con eso, se derive según ellos que el Valle de los caídos no es un mausoleo franquista es una reducción al absurdo; ya que cualquier ciudadano puede comprobar in situ cómo la Fundación no cumple con esos acometidos; mientras las tumbas de Francisco Franco o Jose Antonio Primo de Rivera presiden el templo, miles de cuerpors de represaliados están amontonados sin la más mínima mención ni reconocimiento”
En otras de las preguntas, Mulet argumentaba “ La Ley de la Memoria Histórica (Ley 52/2007 de 26 de Diciembre) obliga a la retirada de la simbología franquista de espacios públicos, edificios, nomenclatura..etc. A pesar de ello el Valle de los Caídos continua siendo un lugar de exaltación del franquismo, una especie de museo de los horrores para los demócratas, donde preside el monumento la tumba del dictador. Por todo ello se pregunta, dentro de sus competencias. ¿Qué medidas va adoptar el Gobierno para hacer cumplir la ley en este caso en concreto?
La respuesta es idéntica a la anterior, con este añadido : 3. Por lo que se refiere a los restos de Francisco Franco Bahamonde y de José Antonio Primo de Rivera, conviene tener presente las recomendaciones contenidas en el Informe de la Comisión de Expertos, creada por Acuerdo del Consejo de Ministros de 27 de mayo de 2011, en el sentido de destacar “las dificultades para revertir la situación creada por los enterramientos en la Basílica” de los anteriores, toda vez que “cualquier actuación del Gobierno en el interior de la Basílica exige una actitud de colaboración por parte de la Iglesia que es a quien se ha confiado la custodia de sus restos y que es quien, dada la calificación legal de la Basílica como lugar de culto, debe dar la preceptiva autorización” (recomendación 31).
O lo que es lo mismo, ante al inacción del gobierno por desfraquizar el conjunto, deriva la responsabilidades a la iglesia, cuando no se ha tomado ninguna iniciativa al respecto.
Según Mulet “todo junto demuestra que el Gobierno está cómodo con el mantenimiento de este monumento de exaltación franquista, que continúan sufragando con fondos públicos a pesar de las lagunas y serias dudas sobre la gestión económica que se está haciendo del monumento. Los principios de la Fundación a los cual hace mención, no se cumplen ni de lejos, la Ley de Memoria Histórica se incumple, las propuestas de la Comisión de Expertos, ni se han estudiado, y todo ello conlleva a que todos los ciudadanos del Estado Español estemos pagando año tras años a un sociedad opaca para que mantenga un gigantesco mausoleo en honor del genocida Francisco Franco y dirigente fascista José Antonio Primo de Rivera, mientras los cadáveres de sus miles de víctimas estén ocultos en los muros de esta monumento, sin la más mínima mención ni reconocimiento . Esto, desgraciadamente, solo puede pasar en España”
El Govern Central respon que no pensa avançar en “desfranquitzar” la Valle de los Caidos.
El senador de Compromís, Carles Mulet ve presentant una extensa bateria d’iniciatives respecte a la situació del mausoleu franquista del Valle de los Caídos . Algunes d’aquestes són preguntes escrites, a més de mocions i peticions de documentació, algunes de les quals es van substanciar després d’una recent visita al lloc.
Dos d’aquestes preguntes han sigut respostes avui pel Govern Central, La pregunta “ El relator especial per a la promoció de la veritat, la justícia, la reparació i les garanties de no repetició de l’ONU, Pablo de Greiff, ha urgit a Espanya a incrementar els recursos que es destinen a les víctimes de la Guerra Civil i el franquisme, a deixar sense efecte la Llei d’Amnistia de 1977 perquè els crims puguen ser investigats i a “reconsiderar” la Valle de los Caídos perquè no es tracta d’un assumpte de “política partidista”.
Per tot açò es pregunta:
-Pensa el Govern soltar llast amb els seus avantpassats ideològics i desfranquitzar la Valle de los Caídos?
La resposta que dóna el Govern és : En relació amb la informació sol·licitada per La seua Senyoria cal informar que en matèria de símbols franquistes, s’ha complit el mandat legal de la seua retirada en l’àmbit de l’Administració General de l’Estat (article 15 de la Llei 52/2007, de 26 de desembre, per la qual es reconeixen i amplien drets i s’estableixen mesures en favor dels qui van patir persecució o violència durant la guerra civil i la dictadura), únic sobre el qual té competència el Govern. En l’àmbit comunitari i municipal s’han fet les recomanacions oportunes, si bé és cert que no sempre han sigut ateses.
D’altra banda, cal assenyalar que el present règim jurídic del Valle de los Caídos ve configurat per diverses normes pre i post constitucionals fins a la Llei 52/2007, de 26 de desembre, citada anteriorment. Aquest últim text tanca aqueixa normativa dedicant al Valle dos preceptes: l’article 16 i la disposició addicional sisena, on es reprodueixen les conclusions contemplades en l’Informe General de la Comissió per a l’estudi de la situació de les víctimes de la guerra civil i del franquisme, creada per Reial decret 1891/2004, de 10 de setembre, i elevat al Govern el 28 de juliol de 2006. En concret aquests preceptes disposen el següent:
– “Article 16. Valle de los Caídos
- La Vall es regirà estrictament per les normes aplicables amb caràcter general als llocs de culte i als cementeris públics.
En cap lloc del recinte podran dur-se a terme actes de naturalesa política ni exaltadors de la Guerra Civil, dels seus protagonistes, o del franquisme.”
– “Disposició addicional sisena.
La fundació gestora del Valle de los Caídos inclourà entre els seus objectius honrar i rehabilitar la memòria de totes les persones mortes a conseqüència de la Guerra Civil de 1936-1939 i de la repressió política que la va seguir a fi d’aprofundir en el coneixement d’aquest període històric i dels valors constitucionals. Així mateix, fomentarà les aspiracions de reconciliació i convivència que hi ha en la nostra societat. Tot açò amb plena subjecció al que es disposa en l’article 16.”
Des d’una perspectiva normativa, resulta clar que el Valle de los Caigdos no té en l’actualitat el significat que suggereix La seua Senyoria.
Per a Mulet, aquesta resposta és insultante “Que diguen que com la fundació gestora del Valle de los Caidos té entre els seus objectius objectius honrar i rehabilitar la memòria de totes les persones mortes a conseqüència de la Guerra Civil , i amb açò, es derive segons ells que el Valle de los Caídos no és un mausoleu franquista és una reducció a l’absurd; ja que qualsevol ciutadà pot comprovar in situ com la Fundació no compleix amb eixos escomesos; mentre les tombes de Francisco Franco o Jose Antonio Primo de Rivera presideixen el temple, milers de cuerpors de represaliados estan amuntegats sense la més mínim esment ni reconeixement”
En altres de les preguntes, Mulet argumentava “ La Llei de la Memòria Històrica (Llei 52/2007 de 26 de Desembre) obliga a la retirada de la simbologia franquista d’espais públics, edificis, nomenclatura..etc. Malgrat açò el Valle de los Caídos contínua sent un lloc d’exaltació del franquisme, una espècie de museu dels horrors per als demòcrates, on presideix el monument la tomba del dictador. Per tot açò es pregunta, dins de les seues competències. Quines mesures va adoptar el Govern per a fer complir la llei en aquest cas en concret?
La resposta és idèntica a l’anterior, amb aquest afegit : 3. Pel que es refereix a les restes de Francisco Franco Bahamonde i de José Antonio Primo de Rivera, convé tenir present les recomanacions contingudes en l’Informe de la Comissió d’Experts, creada per Acord del Consell de Ministres de 27 de maig de 2011, en el sentit de destacar “les dificultats per a revertir la situació creada pels enterraments en la Basílica” dels anteriors, atès que “qualsevol actuació del Govern a l’interior de la Basílica exigeix una actitud de col·laboració per part de l’Església que és a qui s’ha confiat la custòdia de les seues restes i que és qui, donada la qualificació legal de la Basílica com a lloc de culte, ha de donar la preceptiva autorització” (recomanació 31).
O el que és el mateix, davant a l’inacció del govern per desfraquitzar el conjunt, deriva la responsabilitat a l’església, quan no s’ha pres cap iniciativa sobre aquest tema.
Segons Mulet “tot junt demostra que el Govern està còmode amb el manteniment d’aquest monument d’exaltació franquista, que continuen sufragant amb fons públics malgrat les llacunes i seriosos dubtes sobre la gestió econòmica que s’està fent del monument. Els principis de la Fundació als com fa esment, no es compleixen ni des de lluny, la Llei de Memòria Històrica s’incompleix, les propostes de la Comissió d’Experts, ni s’han estudiat, i tot açò comporta al fet que tots els ciutadans de l’Estat Español estiguem pagant any després d’anys a un societat opaca perquè mantinga un gegantesc mausoleu en honor del genocida Francisco Franco i dirigent feixista José Antonio Primor de Rivera, mentre els cadàvers dels seus milers de víctimes estiguen ocults en els murs d’aquesta monument, sense la més mínim esment ni reconeixement . Açò, desgraciadament, solament pot passar a Espanya”